“La lera semana bajé casi 6 kilos, de inmediato se sintió”

Durante mucho tiempo creía que llevaba una vida plena y feliz, conforme pasa el tiempo vamos encontrando algunos eventos que nos desmienten y nos llevan a una realidad. Una de esas desaciertos es creer que nunca perderás a un ser amado, pues a mí me pasó, cuando se va alguien que marca tu vida es terrible, eso me pasó con la muerte de mi suegro, una persona con una visión y un corazón incomparable, desgraciadamente su sobrepeso lo logró vencer y falleció el 31 de enero de un terrible infarto. A partir de ahí todo cambio, mi vida se volvió más temerosa, pensando en que yo también era una persona con sobrepeso y que en cualquier momento podía irme y dejar a mi familia.

El sentimiento de frustración crecía cada vez que me miraba y veía que seguía siendo el mismo ser con kilos que más, fui al gimnasio una par de meses y regresaba adolorido, ese dolor que mis articulaciones no soportaban el cargarme, y cada día el shock emocional por no ver avances crecía. Poco a poco fui aceptando que nunca podía bajar de peso y que permanecería GORDITO hasta que me muriera.

Un buen día en el trabajo se presentó la oportunidad de moverme a una ciudad más cercana a mi casa, por supuesto la tomé y decidí empezar de nuevo. Llegué a la tierra de las masa (Poza Rica), llena de excesos de masa, manteca, que fueron los primeros 6 meses mi alimento, no había día en el que no dejara de comer algo tan rico como unas enchiladas con carne asada, tacos y cualquier antojo que de pensarlo se antoja. Cuál fue mi sorpresa: eso me hizo subir unos cuantos kilos más.

Un buen día, para ser exacto, el sábado 8 de febrero, me levanté, y fui a comprar unas ricas picadas como cada fin, platicando con mi esposa, le comenté que me gustaría bajar de peso, ella se extrañó, le comenté que me gustaría tener una vida más sana, ser una persona que tenga menos riesgo de sufrir enfermedades por el sobre peso, me comentó que varios compañeros de su trabajo (la torre de PEMEX) habían bajado algunos kilos con una famosas malteadas. De entrada la idea me pareció buena, y ese mismo día decidí iniciar. Llegué a manos del Consultor Ulises Griego, el cual tuvo buenos resultados con la malteada y había bajado unos cuantos kilos. Llegué a su casa, me realizó la entrevista y me dio una introducción de lo que era Cambrige, desde luego un poco aséptico, ya que toda le explicación sonaba como a algo que probaría y no me funcionaria.

Llegó el momento de la verdad, el subirme a la báscula y saber que traía encima casi 120 kg, pero no era todo sino me edad metabólica (de una persona anciana- 88 años-), fue cuando me impacté más, además de mis medidas y mi grasa visceral por lo cielos. Estos datos me animaron a tomar la decisión y comenzar el reto hacia mi mismo. Ese fin de semana fue el ultimo fin de comer picadas, comer pizza y cenar empanadas y garnachas.

Fue duro el viacrucis de la primera semana con Cambrige, dejar de comer de la noche a la mañana, mantenerme a base de malteadas, agua, café negro y té verde. Pero lo logré, la primera semana bajé casi 6 KG, todo un reto, de inmediato se empezó a sentir como mi ropa me quedaba un poco más suelta, la panza poco a poco iba bajando. Las reacciones en la oficina no se hicieron esperar, otros como que no creían que fuera a bajar, otros más me echaban porras, otros preocupados porque me podría descompensar, salvo a todo eso seguí adelante, la segunda semana baje otros 4 kg.

Poco a poco seguí bajando de peso hasta llegar a las 6 semana y con casi 25 kg menos, continué con el paso 2 hasta, fue rara la sensación de volver a probar un bocado, mi mente y mi estómago se acostumbraron solo a comer líquidos, me resistía a ingerir alimento, sin embargo poco a poco volví a comer.

El gusto por la comida sin grasa nació en mí, fui dejando tajantemente de comer carnes rojas y el gusto por las carnes blancas surgió en mí, las verduras ahora se convirtieron en mi hit, siempre trato de combinar con cualquier comida con verduras.

Antes de Cambrige era una persona sedentaria, no corría ni si quiera 200 mts, ahora con casi 40 kg menos he corrido distancias de 10 km y actualmente nos entrénanos para un medio maratón. Es increíble que todo este cambio en tan solo 6 meses; 6 meses de volver a nacer y vivir de un modo diferente, ASÉ ES CAMBRIGE, VUELVES A NACER.